Noticias Recientes
Inicio / Noticias / ¡Vengo a cantar tu gloria!

¡Vengo a cantar tu gloria!

Compartir

Por Dimas Romero
Dirigente del Movimiento Antorchista en Quintana Roo    

…¡Vengo a cantar tu gloria, aunque no existas!

¡Vengo a cantar tu gloria, aunque hayas muerto,

y te vengo a traer como homenaje

de razas nuevas y nacientes pueblos,

una nota que arranco a tu sepulcro, 

una voz que he pedido a tu silencio…

 

En el momento en que esto escribo, mis compañeros antorchistas de la ciudad de Bacalar cumplen once días en plantón porque el hasta hace poco presidente municipal, José Alfredo Contreras Méndez, dejó el cargo sin cumplir el compromiso –firmado por él– de dotar a 40 familias con un terreno en el que pudieran edificar un espacio digno para vivir.

Durante tres años alimentaron la esperanza de construir un techo sobre las cabezas de sus pequeños hijos, de sus ancianos padres y de sus esposas, para cubrirlos de la intemperie; pero ahora se pasan sus días y noches bajo una improvisada carpa frente a palacio municipal. En su compañía obtengo las mejores lecciones de mi vida, ésas con las que aprendo no sólo su lengua nativa, sino a querer cada vez más a este pueblo y a sus hijos cuya grandeza, a pesar de haber sido cortada de tajo por la conquista, revive con el recuerdo de glorias pasadas.

14485053_1080665452003177_328613223248636601_n[1]

Bakhalal (entre carrizos), era el hogar de uno de los contingentes más combativos de los mayas. Fue temporalmente sometida en 1544 por los españoles y renombrada como Salamanca de Bacalar; después fue invadida en diversas ocasiones por piratas escoceses, ingleses, franceses y cubanos. Finalmente fue recuperada por los indígenas al inicio de la Guerra de Castas, en 1848, para no volver a ser conquistada, aunque finalmente el general Othón Pompeyo Blanco, fundador de la ciudad de Chetumal, logró pacíficamente que los bacalarenses reconocieran al gobierno de la República.

A medida que logró entender el elevado nivel al que llegó esta bella lengua, dimensiono con tristeza lo que significa para el acervo lingüístico del mundo su paulatina pérdida. Al escuchar sus inflexiones guturales, reconozco el tan peculiar acento “yucateco”. El Maya, que en las arengas de esta raza tan inclinada a involucrarse en los asuntos de su comunidad, cobra un tono grave y enjundioso, que contrasta con su sobria y mesurada conducta, tan poco proclive a los gritos y a los exabruptos, fue cultivado con el esmero y cuidado de una cultura con un alto desarrollo en el saber, como lo prueba el uso del concepto de abstracción o el de prefijos y sufijos para declinar y modificar sus vocablos.

Todavía conservo frescos los combativos discursos de algunos a quienes he escuchado hablar, que no se amilanan ante el micrófono y que en las manifestaciones externan el rencor y la rabia sepultadas por siglos en algún recóndito lugar de la memoria colectiva. Varios de ellos, que se aferran a no permitir que nuestra constitución sea solamente un papel con preceptos legales que no se aplican en la práctica, forman el contingente que, en homenaje a las proféticas palabras de Medíz Bolio, se está convirtiendo en una raza nueva, en un naciente pueblo, que busca adquirir un pedazo de tierra en el lugar en el que un día sus antepasados fueron amos y señores.

Por eso, convencidos de que los gobernantes de la península deben reivindicarlos y devolver aunque sea una parte de lo que les fue arrebatado en los años de conquista, permanecen estoicos en su plantón, sin importar que tengan que pasar largos días y frías noches sin más cobija que el manto sideral, en espera de que el nuevo presidente municipal enmiende el agravio que Alfredo Contreras Méndez les infligió al incumplir la palabra empeñada, misma que ratificó apenas el 15 de septiembre, mintiendo una vez más.

Y es por esa valentía y estoicismo ancestrales que hoy hago a esta ilustre raza  un homenaje, tumen kex mina’an teen k’i’ik Maya, ba’ aba’ al ti’ put’si’cal (porque aunque no tengo sangre maya, lo soy de corazón).


También puedes ver

La quinta parte de la población de Cancún sufre pobreza alimentaria

Por Juan Carlos pool Contreras   La crisis de la pobreza alimentaria en la ciudad …