FBI asegura que ya se identificaron a 300 víctimas. El fundador del portal Playpen, donde se compartían estos videos, fue condenado a 30 años de prisión.
Una amplia investigación internacional sobre una página de internet de pornografía infantil condujo a la captura de 900 personas en todo el mundo y la identificación de unas 300 víctimas, anunciaron el viernes agencias de policía de Estados Unidos y Europa.
La investigación de más de dos años fue realizada a partir del desmantelamiento en 2015 del portal «altamente sofisticado» Playpen, cuyo fundador y gerente fue identificado como el estadounidense Steven Chase, de Florida, condenado esta semana a 30 años de prisión, indicó el FBI en un comunicado.
Playpen, creada en agosto de 2014, es considerada la mayor red para compartir contenidos pedófilos y tenía más de 150.000 usuarios. Su red de «internet profunda» o «darknet», la parte de internet que no aparece en los motores de búsqueda clásicos, usaba funciones para conservar el anonimato.
La investigación del FBI sobre Playpen no estuvo exenta de controversias, dado que la agencia pirateó miles de computadores en más de cien países despertando las críticas de las organizaciones defensoras de las libertades.
El FBI también creó una web pedófila durante una decena de días con el objetivo de identificar a los usuarios. La acción fue denunciada como un abuso.
Steven Chase fue detenido el 19 de febrero de 2015, un mes después de que policías estadounidenses lanzaran la investigación «Operation Pacifier» para atrapar a los usuarios y proveedores de fotos y videos de Playpen.
La Europol, la oficina de policía criminal europea, estuvo a cargo de verificar y cruzar los datos para identificar a los responsables en Europa, donde 368 sospechosos fueron arrestados o condenados, según anunció la institución este viernes.
En Estados Unidos, la investigación permitió 350 arrestos, incluidos 25 productores de pornografía infantil y 51 acusados de agresiones sexuales contra niños. Dos colaboradores directos de Chase recibieron cada uno condenas de 20 años de prisión.
En otros países se contabilizaron 548 detenciones, precisó el FBI.
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