Leobardo Plata Pérez, Doctor en Economía por la Universidad Autónoma
de Barcelona e Investigador Nacional.
Es indudable que muchos dichos y frases populares señalan grandes verdades. Un buen ejemplo, acorde con los tiempos que vivimos, la frase “del dicho al hecho hay mucho trecho”. Oficialmente México es una república federal con tres poderes independientes y autónomos regidos por la Constitución de los Estados Unidos Mexicanos: ejecutivo, legislativo y judicial. A lo largo de la historia hemos visto la concentración del poder en el ejecutivo y el partido político dominante. Ello impide el sano desarrollo de los otros dos poderes y sus instancias. Se pregona el respeto al estado de derecho, pero en la práctica se hace lo contrario. Se ha dicho que México es el país de la simulación. Se pueden dar múltiples ejemplos de ello, quien concentra poder tiene todo para crear documentos y declarar hechos falsos que pasan como verdades oficiales. En los procesos de certificación de programas educativos y productos abundan las prácticas de simulación. Me quiero referir esta vez a un ejemplo concreto que me parece un abuso de poder y simulación.
El gobierno morenista de la 4T intenta erradicar la corrupción, la impunidad, reactivar la economía, entre otros muy loables objetivos. El propósito es bueno, pero no los mecanismos y medios para lograrlo. Voy a comentar solamente dos ejemplos. El caso Lozoya ha atraído demasiada atención y manipulación mediática en los últimos días. Si se quiere que la justicia haga su papel habría que dejar que funcione de manera autónoma. La mediatización e intervención del ejecutivo en las mañaneras solo retrasa los procesos y previene a los culpables a tomar medidas de defensa que terminarán siendo nuevas simulaciones. Nuestra división de poderes y el federalismo son manipulados por intereses de grupos de poder con oscuros objetivos.
Otro ejemplo claro de abuso de poder son los constantes ataques a la organización Antorcha Campesina. Señalo solamente dos casos que me parecen muy graves: el no otorgamiento del registro de la organización como partido político en Puebla y la congelación de la cuenta bancaria del Dr. Brasil Acosta, uno de los líderes de la organización. Cualquiera que conozca la organización un poco de cerca y vea lo que ha logrado a través de los años notará que los hechos referidos no tienen ninguna justificación. Una vez más la ley se manipula en beneficio del que ostenta el poder y se hacen simulaciones y acusaciones que no reflejan hechos reales. La organización ha ido creciendo paulatinamente de forma segura y legal. Basta mirar el desarrollo logrado en los municipios en que ha gobernado Antorcha. El combate a la pobreza y la marginación ha sido lo que ha motivado a la organización. El mecanismo base es lograr el desarrollo humano pleno del ser marginado. No se trata de darle solamente dinero, no es limosnero. La organización trabaja en educación formal, artística, deportiva, científica, en infraestructura para lograr que las comunidades más pobres tengan acceso a servicios básicos de agua, alcantarillado, escuelas dignas, centros de salud. La organización anual de Concurso Nacional de Teatro y Pintura, las Espartaqueadas Matemáticas, las Espartaqueadas Culturales y Deportivas son muestra del avance cultural de los militantes y simpatizantes de la organización. La organización ha generado cuadros con profesionistas muy calificados, con doctorados en instituciones nacionales e internacionales de alto nivel. La gran mayoría de comunidades marginadas y apartadas que han logrado, gracias a la organización, un desarrollo y compromiso con la organización y los problemas del país. El éxito de la organización es el compromiso de sus afiliados. Hemos visto cómo muchos politiquillos van de partido en partido, se venden por un puesto con tal de permanecer en la nómina oficial o del partido que los cobije. En Antorcha no ocurre eso no porque no sea partido oficial aún. Su filosofía es distinta. La misma organización genera recursos propios a través de negocios transparentes y lícitos. Se invita al lector a conocer más de cerca la organización para no dejarse llevar por noticias y aseveraciones falsas.
Resulta un tanto paradójico que tanto Morena como Antorcha Campesina coinciden en fundamentar su lucha en la defensa de los pobres. Los mecanismos y medios de ambas organizaciones son muy diferentes. La economía de un país no se reactiva dando becas y ayudas de sobrevivencia. Se requiere inversión proveniente de la propia gente, de nacionales o extranjeros, pero se requiere tener un clima de confianza y seguridad. La cohesión social es fundamental y pareciera que no le interesa mucho este punto al gobierno actual. Obras como el Tren Maya o el nuevo aeropuerto de Santa Lucía son valiosas pero focalizadas. El país requiere muchas más obras de infraestructura, hospitales, escuelas, etc. Los proyectos deben discutirse y evaluarse públicamente con estudios detallados, hechos y discutidos por especialistas. Los caprichos y el abuso del poder para lograr objetivos personales no conduce a buenos resultados.
Lo que no es casual es la eterna lucha de las organizaciones de izquierda que nunca se ponen de acuerdo para unir sus esfuerzos. El PRD logro aglutinar muchas organizaciones de izquierda pero el acuerdo se erosionó. Morena es reciente y producto de ese rompimiento. Sus miembros pueden permanecer o retirarse según les convenga. Antorcha ha estado creciendo con paso sólido y con mucha cohesión interna por ya casi medio siglo. Sus logros están a la vista y hay plena transparencia. Cualquier acusación o ataque debe sustentarse con denuncias y pruebas, no solo abusando del poder y amenazando por temor a perderlo por la vía de elecciones limpias.