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Abandera una coalicion que se desinfla por la desbandada de los activistas del antes poderoso PRI.
Bacalar.- A un par de días de arrancar la campaña electoral por la batalla de las presidencias municipales en Quintana Roo, en el décimo municipio, la popularidad que presumía José Alfredo «Chepe» Contreras Méndez, se desinfla precipitadamente.
De acuerdo con encuestas de empresas especialistas en esta materia, al menos seis de cada diez habitantes de las comunidades rurales de Bacalar, y de la propia cabecera, desaprueban la osadía del ex alcalde de ir de nueva cuenta en busca del relevo en la silla mayor de esta demarcación.
La gran mayoría de los encuestados, señalan una amañada estrategia orquestada desde la salida de «Chepe» de la presidencia municipal en 2016, cuando dio la estafeta a su alfil y delfín Alexander Zetina Aguiluz, para tener un aterciopelado cierre de gobierno, con la tranquilidad de que no sería objeto de auditorias, ni procesos administrativos que le hagan mella en su oscuro proyecto de largo plazo.
Hoy, la lectura política para la población bacalarense es clara, Contreras Méndez busca por segunda ocasión el voto popular para ser de nuevo alcalde de Bacalar, con la evidente intención de tapar la «cloaca administrativa» que dejará Alexander Zetina a su salida en septiembre próximo.
Además de que, la imposición de «Chepe» Contreras como candidato del PRI no fue vista con buenos ojos por la clase tricolor en turno, que desde la dirigencia municipal de este instituto político, manifestó su abierto rechazo, al grado de desertar de las filas bajo amenaza de sumarse a «los de enfrente», lo cual han ido cumpliendo.
Postura que se hizo extensiva hasta la militancia de Bacalar, y que puso en la cuerda floja el proyecto de una monstruosa alianza conformada con el PAN y el PRD, donde el partido Confianza por Quintana Roo, va de simple relleno al no representar absolutamente nada en este municipio.
Y es que no hay que ser sabios en la materia; si el Revolucionario Institucional ya no pinta como en sus mejores tiempos por la estela de corrupción que arrastra tras de sí, el Acción Nacional y el Partido de la Revolución Democrática, son letra muerta entre el electorado bacalarense.
Bajo este tenor, el autocacareado populismo de «Chepe» va en caída libre, y su proyecto tiene nulas esperanzas frente a sus adversarios y una alianza como «Juntos Haremos Historia por Bacalar», que día a día va cobrando y sumando fuerzas; y eso que la campaña aún no arranca.
