Por Daniel Osorio García
Dirigente del Movimiento Antorchista de Quintana Roo
En esta colaboración quiero dirigirme de manera atenta y respetuosa al C.P. Carlos Joaquín González, gobernador del estado de Quintana Roo, para que, a través de la presente, él sepa nuestro sentir en torno a las gestiones que hemos venido realizando en beneficio de poco más de 35 mil quintanarroenses afiliados al Movimiento Antorchista.
El Movimiento Antorchista ha gestionado desde el inicio de la administración las necesidades elementales de nuestros representados; en su momento entregamos el pliego petitorio con todas y cada una de las demandas de los colonos, campesinos, estudiantes y maestros que pertenecen a nuestras filas. Acudimos infinidad de veces al Palacio estatal para recibir respuesta, pero fuimos turnados a la Secretaría de Gobierno (Segob), quien se encargaría de darle “seguimiento” y “solución” a las peticiones.
El tiempo pasó y la Segob no dio alternativas para solucionarlas, más bien, demostraron falta de interés y sólo dieron manejo político en la solución de las demandas. Muchas reuniones se realizaron, pero en ninguna se avanzó un ápice, al contrario, las cosas estaban estancadas. Fue por eso que decidimos buscarle a usted señor Gobernador, para plantearle directamente las necesidades del pueblo que representamos.
Usted atendió a una comisión del Comité Estatal antorchista en octubre de 2019 que fue encabezada por un servidor. Como dije, en una de mis colaboraciones anteriores cuando hablé sobre el tema, algunas respuestas favorables tuvimos en aquel entonces, sin embargo, después de que diera instrucciones para que nuevamente la Segob se encargara de dar seguimiento a la solución de las demandas, nos encontramos, ¡otra vez!, con cero resultados y más bien, con mil pretextos para “justificar” la nueva tomada de pelo por parte de dicha Secretaría.
¿Qué está pasando señor Gobernador? ¿Es acaso que los encargados de ejecutar sus órdenes se desentienden de las mismas? O ¿Hay alguna otra razón de fondo para que haya una total cerrazón a la solución de nuestras demandas, cuando ya era una directriz de usted?
La respuesta y las razones, seguro estoy, que usted las conoce. Pero lo que también es cierto, es que a nadie le conviene, mucho menos a la Segob, decir “verdades a medias” porque eso equivale a mentir o bien ocultar sus verdaderas intenciones. La reputación de un funcionario público podrá ser irremediablemente dañada si los compromisos hechos con los ciudadanos no se cumplen.
El juego sucio y los engaños no son rentables a largo plazo porque minan la confianza de la ciudadanía y sin ella, el pueblo, que es quien pone y quita a sus representantes en el Gobierno, la política constructora de futuro se echaría por la borda. La consecuencia de todo esto es que, si se pierde y se desilusiona la gente, también hay disminución de votos y, por tanto, de los futuros cargos de elección popular.
Todo esto nos ha orillado a tener que hacer uso de nuestro derecho a la manifestación pública consagrado en los artículos 6° y 7° de nuestra Carta Magna, para exigir que nuestras demandas sean resueltas, toda vez que no se trata de caprichos, sino de necesidades elementales de los quintanarroenses más humildes. A los antorchistas no se les puede acusar de intolerantes, “grilleros” o desestabilizadores sólo por el hecho de reclamar que se cumpla, por lo menos, lo que ya es compromiso de usted señor Gobernador.
Por último, vale la pena mencionar que nosotros todavía tenemos confianza en su administración y hemos dado prueba de ello como el pasado 28 de septiembre, donde suspendimos las manifestaciones programadas en Cancún y en la capital del Estado porque el Dr. Arturo Contreras Castillo, secretario de Gobierno, nos pidió suspender las movilizaciones a cambio de un convenio de colaboración entre el Gobierno y Antorcha para la solución de las demandas. Este convenio, que quedó pactado firmarse el pasado 6 de octubre, hasta el momento no se ha hecho y las demandas tampoco han tenido avances en su solución. Pensamos que sólo es “un retraso” burocrático y no una nueva jugada de la Segob.
Insisto, confiamos en el Gobierno de Quintana Roo, y no queremos que nuevamente la Segob caiga en la falacia de “las verdades a medias” como en un inicio sucedió. Por lo que hago un llamado respetuoso para que se dé muestra de que verdaderamente hay seriedad e interés en la solución de las demandas planteadas, eso hará que los ciudadanos que hoy andan incrédulos del Gobierno, le tengan confianza y lo apoyen, sine qua non para que sigan gobernado en la siguiente administración estatal.