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Bacalar, Quintana Roo, Agosto 17 del año 2017.- Las tarifas de energía eléctrica están estrangulando la situación económica de las diferentes empresas que se dedican al ramo turístico en el Pueblo Mágico de Bacalar, porque en dos años han incrementado entre el 25 y 32 por ciento.
David Martínez Sánchez, presidente de la Asociación de Hoteles y Restaurantes de Bacalar, aseguró que son alrededor de 50 empresas prestadoras de servicios turísticos las que sufren el embate de las tarifas de energía eléctrica. «Es nuestro principal golpe financiero, se ha elevado estratosféricamente», señaló el empresario.
Dijo que empresas que pagaban alrededor de ocho mil pesos hace dos años, ahora les llega recibos de alrededor de 26 mil pesos, los que menos pagan, porque quienes pagaban entre 14 y 15 mil pesos hoy registran cobros de hasta 60 mil pesos bimestrales, lo que consideró exagerado.
Lamentó que el pésimo servicio que reciben con las constantes fallas, no las toman en cuenta en el momento de facturar. «Desde que entró la polémica «reforma energética, las tarifas se han quintuplicado en un lapso de un año».
Consideró que tal pareciera que las autoridades federales están dispuestas a acabar con las pocas empresas generadoras de empleos en el sur de la entidad, ya que con el aumento desmedido de las tarifas de energía eléctrica derivadas de dicha reforma, se torna más difícil la situación de los prestadores de servicios turísticos del Pueblo Mágico.
Dijo que se encuentran atados de manos porque no cuentan con opciones para minimizar esta situación, ya que se trata de un monopolio y lo están haciendo para que la ciudadanía considere la posibilidad que se abra al mercado y haya diferentes empresas de luz para competir.
Martín Morales Sánchez, conocido empresario restaurantero de Bacalar, consideró un abuso los cobros de la Comisión Federal de Electricidad, porque a pesar que adoptan medidas de racionalidad en el consumo energía, los pagos oscilan entre 45 y 48 mil pesos bimestral.
Nicanor Piña Ugalde, quien cuenta con un hotel en las afueras de Bacalar, señaló que su consumo oscila entre 12 y 16 mil pesos bimestrales, además de los pagos que implica su actividad que es de dos mil 400 al mes al Seguro Social; tres mil consumo de agua potable, tres por ciento de hospedaje, tres por ciento de nómina, tres mil al mes de gas butano, 15 mil mensual de sueldos a su personal.
Por si fuera poco, su transformador sufrió un desperfecto que le saldrá en 24 mil 300 pesos más IVA, además de seis mil pesos de grúa, entre otros gastos que están «asfixiando» al sector hotelero, dijo. (RQ).(CORTESIA DE RADIOGRAFIA QUINTANA ROO)
