Señor Gobernador,
Somos padres y madres de familia preocupados por el odio y maltrato que se ha presentado por la Secretaria de Educación hacia nuestras niñas y niños, particularmente aquellos que tienen las necesidades más urgentes o los que requieren una atención especial, pero que con Marisol Alamilla sólo hemos encontrado falta de sensibilidad y puertas cerradas.
Nuestros hijos asistían a sus tratamientos médicos en el Hospital General de Chetumal, gracias al programa sigamos aprendiendo en el hospital, el cual hasta que llegó esta Secretaria de Educación fue un apoyo muy importante para que se evitara el rezago educativo y sobre todo, que pese a su delicado estado de salud, nuestros niños no perdieran el curso escolar.
Nos informaron de un día al otro que ese programa no sigue más y en Salud culpan a la Secretaria de Educación, pues de repente el maestro que les daba clase a nuestros hijos se tuvo que ir, diciéndonos que era órdenes de recursos humanos y que lo iban a correr por estar en el hospital y no en una escuela. Lo último que supimos es que ya no regresará el profesior y que no habrá más maestros para que los hijos enfermos de quienes escribimos esta carta, puedan tener una oportunidad de superarse y recibir lecciones a pesar de estar muy graves en algunos casos.
¿Por qué los niños enfermos deben pasarla mal? ¿La Secretaria tampoco quiere que haya niños con cáncer o con enfermedades graves, como cuando quería borrar a los niños especiales? ¿No pueden recibir escuela como todos los demás?
EDUCACIÓN PARA LOS NIÑOS EN TODO LUGAR, SIN IMPORTAR SU CONDICIÓN O SALUD.
Todos tenemos derechos y usted habla de oportunidades y la de estudiar es de las más importantes, por eso sabemos que nos va a escuchar.