La Comisión Federal de Electricidad podría provocar accidentes fatales por negligencia ya que ha ignorado las recomendaciones emitidas por las autoridades municipales del Ayuntamiento de Othón P. Blanco, para reparar y asegurar sus instalaciones que se encuentran en la vía pública.
El director de Protección Civil Norman Mcliberty Pacheco, reveló que hasta el momento han detectado más de 100 zonas de riesgo en la ciudad sin que hasta el momento la paraestatal haya atendido alguno de estas, a pesar de los exhortos enviados en al menos tres ocasiones.
“En la ciudad hay bastantes tapas muy deterioradas, rotas o ya no existen y representan un riesgo para los ciudadanos si alguien por accidente o error pudiera caer, nosotros en estos momentos estamos haciendo un censo para ver cuantas tapas o registros requieren mantenimiento, también están los centros de carga y transformadores que no tienen puertas y cualquiera puede meter su mano y sufrir algún accidente por eso se requiere que comisión ponga atención en darle mantenimiento a sus instalaciones”.
La avenida Álvaro Obregón y otras vialidades de la zona centro, así como en el Fraccionamiento Caribe es donde se concentra el mayor número de puntos que ponen en riesgo la vida de ciudadanos al encontrarse registros sin tapas y transformadores con cables expuestos de alta tensión.
El funcionario dijo que esta omisión de la CFE de en darle mantenimiento a sus instalaciones ponen en riesgo inminente a los ciudadanos, sin embargo reconoció que como dirección de protección municipal únicamente puede emitir recomendaciones ya que no pueden sancionar a esta autoridad federal.
Añadió que ante estas limitaciones para sancionar, se estarán buscando por medio de la comisión de seguridad pública y protección civil del cabildo, establecer un mecanismo legal que permita poder obligar a la paraestatal a cumplir en subsanar las observaciones ya sí evitar poner en riesgo a la población por cables expuestos o instalaciones que no están correctamente protegidas.
En un recorrido por la ciudad se pudo constatar lo anterior, incluso algunos centros de carga están amarrados con hilos y «trancados» con piedras, para evitar incidentes.