El director de Salud Pública del Ayuntamiento de Othón P. Blanco, Fidelidad Cabrera Olivera, reveló que se registró un incremento del 40% de las enfermedades gastrointestinales en estudiantes de nivel básico por el consumo de alimentos contaminados que son comercializados por vendedores ambulantes.
Reconoció que se la presencia estos puestos a los alrededores de las escuelas públicas, representan un problema de salud ya que se desconocen las condiciones en que fueron elaborados los alimentos, además de que la mayoría no implementa medidas higiénicas para conservar en buen estado sus productos.
Ante esta situación las autoridades municipales han iniciado un acercamiento con las autoridades educativas y padres de familia para recomendar a los menores de edad, evitar consumir los alimentos de dudosa Porce decencia que ofrecen los ambulantes.
“Que nos ayuden a decirles a sus hijos que no consuman esos productos que están en las puertas o alrededores de las escuelas porque no tenemos la seguridad que sean productos sanos para consumo de los niños, hemos visto que se enferman, ahora se han incrementado las enfermedades gastrointestinales a pesar de no ser la época del año pero siguen estando presentes a causa de alimentos contaminados porque no protegen los alimentos y están expuesto al medio ambiente y eso los contaminan aunque estén bien preparados en los domicilios pero al sacarlos a la venta se contaminan y eso produce enfermedades en los niños”.
El funcionario municipal afirmó que a pesar de ser ambulantes, hay quienes se instalan en ciertos horarios a las afueras de las escuelas aún y cuando esto no está permitido en el reglamento que regula la dirección de fiscalización, reglamento y vía pública.
Destacó que en al menos el 50% de las escuelas existen ambulantes que expenden alimentos propensos a contaminarse de bacterias patógenas por no estar debidamente resguardados.
“La gente sigue acudiendo a las cercanías o puertas de las escuelas cuando ellos sabe que no está permitido, nosotros como dirección de salud nos apersonamos, hacemos las inspecciones para ver las condiciones sanitarias de alimentos indumentaria y tarjetas de salud de los vendedores ambulantes y al interior de las escuelas le corresponde a la Secretaría de Educación verificar los productos que vende en las tiendas escolares”.
Dijo que otro de los problemas aunque no es su competencia, es la venta de alimentos chatarra al exterior e interior de los planteles educativos, lo cual ha contribuido a la prevalencia de niños con obesidad o sobrepeso y otros padecimientos a temprana edad.