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Por Jorge Argüelles
Chetumal.- Ciriaco Yeladaqui Tello denunció el acoso laboral del que fue víctima la tarde de este miércoles en las oficinas de Instituto Quintanarroense de la Juventud (IQJ) a cargo de Alma Alvarado Moo.
Este trabajador con más de 20 años de servicio, narró que fue requerido a la oficina de la Directora Administrativa Tania Gómez Rojas, quien le exigió firmara su renuncia con el pretexto de la pérdida de confianza a pesar de afirmar haber cumplido con todas los encargos y hasta exigencias de los altos funcionarios a quienes señaló de déspotas.
“El pretexto es que según porque no está actualizado el inventario, que no cumplo con el trabajo que exigen, pero he cumplido con todos los encargos, me dijo ya está harta de mí y que ya no confía y que ha perdido la confianza, que ya no quiero trabajar conmigo y que la directora general le dio la instrucción y por eso me pidió que entregue mi renuncia voluntariamente para no llegar a más consecuencias”.
Expuso que Tania Gómez Rojas quien fuera la secretaria privada de la ex directora Katia Atondo Apodaca en el sexenio de Carlos Joaquín, lo amenazó que dé no firmar, sería denunciado por acoso laboral.
Tras salir publicada una versión en redes sociales, dijo que la directora Alma Alvarado Moo regresó a las oficinas del IQJ para seguir intimidándolo y presionándolo a que firme su renuncia “voluntaria”.
“La directora a nadie saluda, ni habla, es prepotente y déspota, se dirigió a mi molesta, me dijo que nadie me estuvo reteniendo y que a nadie le dio la instrucción de correrme y que si sabía que significa esto, que era una negociación y que ya lo complique”.
Fue claro en precisar que intentaron retenerlo en la oficina con el argumento de que tendría que entregar toda la información y documentos requeridos aunque implicara quedarse después de su horario laboral.
“Te encierran en una oficina y te dicen que entregues toda la información y como es mucha lleva mucho tiempo, me dijo que nos podíamos quedar hasta tarde de ser necesario cuando mi horario es de 9 a 5, eso es querer retener en contra de mi voluntad”.
De acuerdo a otros testimonios de trabajadores, esta sería la tercera ocasión en que la Directora Administrativa Tania Gómez Rojas aplica este terrorismo laboral con la excusa de seguir instrucciones de su jefa, Alma Alvarado Moo con la finalidad de dar de baja a la mayor cantidad de trabajadores para contar con más espacios y poder colocar a sus recomendados.
En una ocasión, varios trabajadores fueron llamados a la misma oficina y presionados hasta que lograron obtener la firma de renuncia “voluntaria”.
A pesar de que se instalan comités para prevenir y erradicar la violencia, el acoso sexual y laboral, en estas nuevas oficinas del IQJ en las que se paga de renta más de 60 mil pesos mensuales, no hay nadie que castigue estas malas prácticas de los altos funcionarios.
