Temor y preocupación se vive en la zona cañera debido a la inseguridad, pues en días pasados fue secuestrado el hijo de un exdirectivo de Sanidad Vegetal, hecho que se guardó con sigilo; afortunadamente no hubo pérdidas que lamentar.
La mayoría de los productores de caña de azúcar de la ribera del río Hondo ha tomado las debidas precauciones ante los hechos registrados, en donde se secuestró el hijo de uno de ellos porque creen que tienen suficiente dinero para pagar el rescate.
Algunos productores cañeros tuvieron conocimiento del hecho y ante lo delicado del tema prefieren quedarse callados y tomar las debidas precauciones para no sufrir el mismo problema, porque ser privado de la libertad es cosa seria.
El caso se manejó a un alto nivel, por lo que pocos productores cañeros tuvieron conocimiento del hecho en el momento oportuno, pero desde esos días viven en una total preocupación.
De acuerdo con los datos recabados se logró la libertad del hijo del cañero luego de pagar una suma en efectivo, pese a que no fue la que exigían los secuestradores, y aunque los hechos se registraron en la ribera del río Hondo, la transacción fue en Chetumal.
Un mito de los habitantes del sur del estado es que piensan que los productores cañeros tienen mucho dinero, cuando en realidad no es cierto, pues llevan tres años de pérdidas, además de que los recursos que han obtenido los invierten en sus tierras y maquinarias.