La intransigencia y carácter represor del presidente municipal de Felipe Carrillo Puerto, José «chak mex» Esquivel Vargas, relucieron ahora con el resultado de una convivencia deportiva celebrada en José María Morelos.
Este domingo se disputó «el clásico de béisbol» entre Broncos de José María Morelos y Mayas de Felipe Carrillo Puerto.
Los primeros obtuvieron la victoria de 10 carreras contra 7.
El presidente municipal de Felipe Carrillo Puerto estuvo de «invitado especial», pese a ser funcionario de 24 horas.
Al perder «su equipo» se retiró molesto e insultando a la porra de «los broncos», pues según él, los árbitros les favorecieron.
Para desquitar su frustración ordenó a los agentes de la Policía Municipal Preventiva (PMP) a detener al presidente de la Liga de Béisbol Estatal «Manos Independientes», Manuel Rentería, a quien también le despojaron de su vehículo, al pasar por Felipe Carrillo Puerto.
Por presión ciudadana, el promotor deportivo fue liberado horas después pero no así su carro.
La conducta intransigente y discriminatoria del presidente municipal de Felipe Carrillo Puerto atemorizó a los deportistas y sus familias, porque el próximo 27 está programado el juego de «vuelta», ahora en Felipe Carrillo Puerto.
Solicitan la intervención de la Comisión de Derechos Humanos del Estado de Quintana Roo (Cdheqroo), pues temen por su integridad.
Y es que Esquivel Vargas tiene antecedentes represores, inclusive hacia comunicadores.