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Historia La primera reina de la Feria del Arroz en Escárcega

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Las fiestas y tradiciones son la parte esencial de la identidad de un pueblo. Rescatar estas actividades es conocer nuestras raíces, y sobretodo la herencia de una cultura.
Las festividades religiosas representan la fe de un pueblo, y los escarceguenses lo demostraban cada año, ya que antiguamente se realizaba la fiesta en honor a la Virgen de Fátima. Dichas festividades iniciaban del día 6 al 13 de mayo.

El primer día se bajaba la imagen de la Virgen, lo que marcaba el inicio del novenario con misas y rosarios.
El día 13 era el más importante ya que los habitantes del pueblo acudían a llevar las tradicionales “Mañanitas” a la Virgen, continuando con la misa, y en la noche la procesión por las principales calles del poblado.

El presbítero era el Sr. Pedro Zenón Aguilar Raygosa (+).
Por muchos años, de esta singular manera se llevaba a cabo las festividades religiosas del pueblo.

Es en el año de 1968 en la administración del Dr. Ángel Gamboa Rodríguez (1968-1970), cuando deciden darle mayor auge a estas fiestas y unen lo religioso con lo popular.
Así, nació la Feria de mayo o la feria del Arroz; uno de los principales productos agrícolas del ejido.

Previo al inicio del festejo anual, se inscribieron las señoritas que competirían para elegir a la primera reina de la Feria de mayo.

Las señoritas fueron: Inés García, Tomasa Gutiérrez, Amanda Aguilar, Gloria Luz Martínez Olvera, Rosario Campos y Dulce Medina Cahuich.

En esta ocasión la cervecería Corona contribuyó para el mejor lucimiento de la feria, por lo que la elección sería la señorita que reuniera más corcholatas de dicha empresa cervecera.

Antes de elegir a la finalista, se realizaron dos bailes en la cancha del pueblo para sondear el desarrollo de las votaciones. Eran bailes populares donde la alegría y la competencia reinaban en cada momento.
Los diferentes grupos apoyaban a su favorita con grandes cantidades de corcholatas, quedando la duda en el aire para la próxima semana.

En el segundo baile se eligió a la ganadora, la señorita Gloria Luz Martínez Olvera, y las otras participantes serían sus embajadoras.

La coronación se llevó a cabo en los amplios salones del Savoy Club. Y la entrada triunfal estuvo a cargo de la banda de guerra de la Escuela Técnica Industrial y Comercial E.T.I.C. 109.

La señorita Gloria Luz fue coronada por el presidente del H. Junta Municipal, el Dr. Ángel Gamboa Rodríguez.
El conjunto que amenizó aquella inolvidable noche fue la Sonora Campeche.

La coronación de la señorita Gloria Luz marcaba el inicio de la feria de mayo; feria que se realizaba año tras año, pero que ésta, era la primera vez que se elegía una reina.

Una feria modesta como las actuales, pero estas, no superan a aquellas en la alegría desbordante en que se vivía, en buen humor y el mejor de los ánimos.

En algunas esquinas la puesta de “toldos” en los cuales solía bailarse, los puestos y los juegos mecánicos llenaban todo lo que hoy es parte de la avenida Héctor Pérez Martínez, y al final de ésta (donde actualmente se ubica el Centro de Salud Dr. Eduardo Boldo Gómez) se construía el ruedo para las corridas de toros.

En las noches las calles abarrotadas de gente, todo en un solo lugar; y la diversión para todos.

El sábado antes de que iniciara la corrida de toros en el ruedo Miguel Cepeda “El Breco”, se paseaba por las calles del pueblo a la reina y a sus embajadoras en camionetas.
Así, llegaban al ruedo donde elegantemente montadas a caballos recibían los aplausos del pueblo escarceguense.
Los toreros vivían la alegría del pueblo, ya que ellos partían a pie desde el Hotel “Bertha Leticia” hasta el ruedo.

El último día de la feria se realizaba un baile para cerrar las festividades populares, y la procesión de la Virgen de Fátima culminaba las religiosas.

Cabe hacer mención que los fiesteros se quedaban todavía algunos días más para el deleite del pueblo.

Por muchos años se continúo con la tradición de unir la fe del pueblo con la alegría de los escarceguenses.

Poco a poco las fiestas populares o mundanas rebasaron la fe y la religión del pueblo; ya que éstas se fueron olvidando del objetivo de aquella unión, darle mayor auge a la feria.
Las fechas de las fiestas populares ya no coinciden con el último día de la fiesta de la patrona del pueblo. La Virgen de Fátima, 13 de mayo.

Se olvidaron que esta fiesta fue la que marcó el inicio de una tradición que hasta la fecha se sigue realizando desde hace 70 años.

Es el presbítero Juan Heliodoro Cantún Huchin, el que decide separar esta tradición de la feria popular.

Actualmente la grey católica celebra la fiesta al Inmaculado Corazón de María, patrona de la parroquia de la ciudad de Escárcega. Del 15 al 22 de junio.

En conclusión, de las ferias de entonces, se puede decir que, ¿todo tiempo pasado fue mejor? Quien sabe, pero se trata de un espejismo de nuestra vanidad; o no queremos olvidar la amada añoranza y deseamos retener y aprisionar de por vida aquel instante en que fuimos plenamente felices.

Vía: Escárcega Real

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